Cangrejos de río al estilo Burgos


Hace más de treinta años, cuando pasábamos las vacaciones de verano en Burgos, solíamos ir algunos días a pescar cangrejos con mis tíos y mis primos. Acampábamos en explanadas a la orilla del río, cerca de pueblos como Puentedura, Hortigüela o Vizcaínos. Mi tío Luís llevaba preparados varios frascos con el cebo para poner en los reteles, una mezcla un tanto asquerosa de olor muy penetrante compuesta de trozos de hígado y patata cocidos y vinagre. Ya de noche, antes de cenar, se ponía el cebo en los reteles y los echábamos al río con la ayuda de una vara acabada en horquilla, en puntos estratégicos designados por mi tío, donde hubiera poca corriente de agua. Después de cenar y hasta bien entrada la madrugada íbamos recorriendo la orilla una y otra vez con la ayuda de una linterna, sacando retel tras retel, recogiendo y guardando en un saco los cangrejos que habían caído, siempre que fueran lo bastante grandes.
Al día siguiente se preparaban en una cazuela para la comida.

Esta receta es típica de Burgos y se la dio a mi madre mi tía Crescen. Para comerlos hechos de esta forma es imprescindible tener una buena cantidad de buen pan a mano para untar la salsa.

Ingredientes

  • Un paquete de cangrejos de río congelados (a falta de cangrejos directamente pescados en río, ahora se pueden conseguir ya cocidos y congelados «La Sirena»)
  • Aceite de oliva,
  • Un pimiento verde
  • Dos dientes de ajo
  • Una pastilla de caldo de carne concentrado
  • Un vaso de vino blanco
  • Harina, pimentón dulce, pimentón picante y unos granos de pimienta negra.

Preparación

  • En una cazuela, poner una buena cantidad de aceite de oliva y rehogar un pimiento verde cortado en tiras y un par de dientes de ajo cortados en láminas.
  • Echar una cucharada de postre colmada de harina y remover bien.
  • Echar media cucharada de postre de pimentón picante y otra media de pimentón dulce y remover bien.
  • Enseguida echar los cangrejos descongelados (que ya están cocidos) y remover bien.
  • Echar un vaso pequeño de vino blanco y otro vaso de agua.
  • Echar la pastilla de caldo concentrado desmenuzada y remover todo bien.
  • Echar unos granos de pimienta negra, remover todo bien y dejar cocer un cuarto de hora, con la cazuela tapada. Deben quedar muy caldosos.
  • Dejar reposar antes de comer. Es mejor comerlos tibios o fríos y normalmente están mejor de un día para otro.

Deja un comentario